La percepción de los encuestados cambió después de participar en una demostración
Intel, el fabricante de microprocesadores, está apostando por los vehículos conectados y la conducción autónoma. El trabajo en esta tecnología supone inmensos retos, como el desarrollo de una IA (Inteligencia Artificial). Es por ello que la compañía hizo públicos los resultados de un estudio que llevó a cabo detallando cómo se siente el público frente a un vehículo autónomo.
El estudio Intel Trust Interaction Study detalla dos grandes preocupaciones. La primera es que el ser humano se resiste a entregar el control a una máquina en un área de competencia que siempre tuvo; mientras que la segunda es una vez que ha entregado el control, qué nivel de interacción tendrá con la máquina.
Las personas consultadas no tenían experiencia previa con un vehículo autónomo y sus niveles de confianza mejoraron notablemente después de una demostración.
La mayoría de los encuestados consideraron que el vehículo autónomo conduciría mejor que un ser humano, sin embargo existen preocupaciones de cómo reaccionaría éste frente al comportamiento errático -para una máquina- de los humanos.
Por otro lado, quienes participaron del estudio ven como algo positivo que el vehículo autónomo dé información con una voz humana, pero también se preguntan si el o los pasajeros podrían darle indicaciones, sugerencias o consejos.
Los encuestados quieren información (saber cómo funciona, qué ruta ha escogido y por qué), pero temen que el vehículo se exceda y esto se convierta en algo molesto.
Fuente: Motorpasion.com