El sistema buscará mantener la presión de los neumáticos de forma automática
La tecnología AMT, que Goodyear lleva investigando desde 2011, busca mantener constante la presión de los neumáticos sin recurrir al inflado manual. Mediante una bomba peristáltica, que se une al resto de componentes que van dentro del neumático, se consigue mantener automáticamente la presión en los niveles deseados. El objetivo que persigue Goodyear con esta innovación es, además de hacer más cómoda la vida de los conductores, mejorar el rendimiento ecológico y económico de los vehículos. La presión de los neumáticos es un factor importante en el gasto de combustible y a través de la tecnología AMT se puede conseguir una presión constante y estable.